Los calvotes

Muchas veces hemos comentado en esta larga y estrecha ciudad la relación existente entre comer "calvotes" (castañas asadas para los de la capital....), beber agua e ir al cuarto de baño....Y no es broma. Es un cóctel explosivo que se conoce desde tiempo inmemorial, (o eso al menos se ha transmitido de padres a hijos), y que de cumplirlo puede dar lugar a los temidos retortijones que preceden a la evacuación digestiva. Por ello, cuando esta mañana la paciente nos dijo que se había mareado después de haber ido unas cuantas veces al cuarto de baño durante la noche, pudimos averiguar que el inicio de tal urgencia fue que... "ayer comí unos cuantos calvotes..."

Y pasamos el día con un síntoma pre-catarral de esos que la desgana y el mal cuerpo hace que se presagie una gripe estacional, o al menos un catarrillo de esos que suelo tener antes de llegar el frío de esta zona. Por eso, esta noche antes de ir a descansar me tomaré un vasito de leche con miel para ver si sudando se nos pasa...

Mañana concentración ante las puertas del Hospital de Béjar de los trabajadores, que hartos de la sinrazón y el pasotismo de la Junta de Castilla y León, mostrarán (mostraremos) nuestra protesta por algo que viene sucediendo desde hace años en el centro hospitalario, como es la muerte por inanición del primer Hospital que se construyó como tal en la provincia de Salamanca. Aunque mucho me temo que los dirigentes de la Consejería de Saniadad harán "oídos sordos" a un clamor popular como este. Y si no, que se lo pregunten a los de Ciudad Rodrigo....