21 mayo 2009

Que siiiiii

Que siiiiiiii, que de verdad que voy a escribir más a menudo, pero es que a veces no puedo porque no tengo línea de internet (que me la han cortado) y cuando he salido de la guardia me da muchas veces una pereza que hasta miedo tengo de que esto se cronifique. Pero bueno, intentaré ser más constante….

Las últimas guardias han estado tranquilas aunque seguimos con los viajes a salamanca entre las obras de la autovía y el asfaltado de la carretera antigua, que más bien podían haberse esperado unos meses y haberlo realizado una vez acabada la Ruta de la Plata. Pero como en esto de las previsiones parece que siempre pecamos de dejadez, hacemos dos obras a la vez y nos quedamos tan panchos…
Hace unos días salimos (salieron) hasta la localidad de Montejo, donde un accidente de circulación, provocado por las retenciones de las obras de asfaltado y por el despiste de un conductor en dirección a Salamanca, hizo que se movilizaran numerosos medios de Emergencias ante la gravedad del siniestro. Y es que muchas veces me da pánico el pararme en una fila de vehículos, más si cabe después de haber asistido hace ya bastantes años a uno de los peores accidentes de circulación de nuestra zona donde un camión articulado se llevó por delante más de una decena de coches que estaban parados ante las retenciones provocadas por las obras de asfaltado en una zona muy cercana a la que me estoy refiriendo. Es por ello que cuando llego el último a la fila de coches, no hago más que mirar por el espejo retrovisor con ojo avizor, por si el que llega detrás de mí, no tiene intención de detenerse. Desafortunadamente en este accidente perdió la vida una persona y varias resultaron heridas de gravedad. Y no será porque no haya señalización y personas parando el tráfico (porque todo estaba perfectamente organizado) sino que una de las causas de estos accidentes se debe a la despreocupación que existe por parte de aquellos que pasamos habitualmente por esta zona y que nos pasamos las señales por el “forro”.
Y al tío “labanderita” a veces ni le vemos. Es una pena pero es así…

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