Hoy se presentaba el día espeso y desde primera hora de la mañana habíamos estado “dormitando”, -como decía Elena- con ganas de que hubiera algún aviso.
Ella, que dentro de poco se nos va a Extremadura, con un trabajo más estable que aquí en Castilla y León, estaba como nerviosa.
Y llegado la hora de la cena y cuando el sol ya no estaba en el horizonte, salimos hacia Linares de Riofrío a un accidente de tráfico. Las primeras noticias no eran nada buenas y nos ofrecían un panorama preocupante.
Después de llegar unos minutos más tarde de lo normal debido a una información errónea del punto kilométrico y de la situación, nos dispusimos a atender. Y seguramente haya tenido mucha suerte el paisano por cómo se produjo el accidente. Un camión que se sale de la carretera y es embestido por detrás por un vehículo cuyo conductor se baja a llamar y avisar por teléfono....
De noche, sin chaleco, poca visibilidad…..y otro coche que llega. Lo demás se lo pueden imaginar. El paisano que da con sus huesos debajo de su propio vehículo debido al segundo impacto…
Muchos accidentes debido a estos errores, muchas muertes evitables por el simple hecho de señalizar y estar atento al tráfico. Un simple chaleco y el sentido común que muchas veces nos falta en situaciones estresantes, serían suficientes para que no pusiéramos en peligro nuestra propia vida. Y también nosotros, los sanitarios que trabajamos en la carretera, muchas veces en condiciones de escasa visibilidad y seguridad.
Cuidado, cuidado, cuidado, mucho cuidado es lo único que os puedo decir.
Recordad que no tenemos por qué ser vistos por los demás vehículos.
Simplemente que hemos de protegernos con más ahínco.
Ella, que dentro de poco se nos va a Extremadura, con un trabajo más estable que aquí en Castilla y León, estaba como nerviosa.
Y llegado la hora de la cena y cuando el sol ya no estaba en el horizonte, salimos hacia Linares de Riofrío a un accidente de tráfico. Las primeras noticias no eran nada buenas y nos ofrecían un panorama preocupante.
Después de llegar unos minutos más tarde de lo normal debido a una información errónea del punto kilométrico y de la situación, nos dispusimos a atender. Y seguramente haya tenido mucha suerte el paisano por cómo se produjo el accidente. Un camión que se sale de la carretera y es embestido por detrás por un vehículo cuyo conductor se baja a llamar y avisar por teléfono....
De noche, sin chaleco, poca visibilidad…..y otro coche que llega. Lo demás se lo pueden imaginar. El paisano que da con sus huesos debajo de su propio vehículo debido al segundo impacto…
Muchos accidentes debido a estos errores, muchas muertes evitables por el simple hecho de señalizar y estar atento al tráfico. Un simple chaleco y el sentido común que muchas veces nos falta en situaciones estresantes, serían suficientes para que no pusiéramos en peligro nuestra propia vida. Y también nosotros, los sanitarios que trabajamos en la carretera, muchas veces en condiciones de escasa visibilidad y seguridad.
Cuidado, cuidado, cuidado, mucho cuidado es lo único que os puedo decir.
Recordad que no tenemos por qué ser vistos por los demás vehículos.
Simplemente que hemos de protegernos con más ahínco.
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